jueves, 13 de marzo de 2008

Culito extrañado


Muy buenas.

Ya que hace tiempo que no os escribo, os quería hacer el seguimiento de la pulgui para que todos sepáis como se encuentra.

La niña es un encanto (momento padre y baba chorreando), es bastante buena y más guapa que todas las cosas. De salud se encuentra fantásticamente a pesar que es de culito extrañado. El culito extrañado lo tienen esas personas que no consiguen hacer sus necesidades fisiológicas todos los días, que no van al baño con facilidad, que se taponan... Ello origina que de vez en cuando, durante el día, la peque se encuentre inquieta, molesta y no concilie el sueño o la paz necesaria para quedarse dormidita.

La hemos llevado al médico un par de veces, en la primera le metieron una sondita en su pequeñin culete y le sacaron como yo digo el "acumulao", que los bingueros no tendrán problemas en imaginarse que cantidad de caca soltó. La segunda vez como seguía con el denominado culito extrañado volvimos a llevarla al médico y esta vez no hubo sonda, le recetaron unos supositorios y una manzanillita milagrosa. Se le puso el supositorio y en cuestión de unos minutillos volvió a largar el tako. Tal fue el desahogo de la niña que en el último esfuercito se quedó completamente k.o. dormida como un lirón.

Por la tarde noche volvió a encontrarse muy inquieta y nos temimos de nuevo lo peor, pero en ese momento hizo su entrada la manzanilla milagrosa, un par de cucharaditas y mejor que un bálsamo. Tiesa hasta las 3 de la mañana. Así que por ahora todo va benne. Mientras que hagan efecto los tratamientos del médico.

Bueno pues el parte de hoy ha finalizado.

Saludos a los de culito extrañado ( en este momento me acuerdo de dos, uno muy grande y otra muy pequeña. Ellos sabrán quienes son).

domingo, 9 de marzo de 2008

SUS PRIMERAS PALABRAS


Y si no dijo nada, lo pensaba.

Retratada por uno de los mejores




Esta foto se la dedicamos al tito Toni.
Ya que criticó la técnica fotográfica de su padre, hemos hecho que Andy Warhol la retrate. Di algo ahora, tito Toni .





Alejandra y su Tatoo




Aquí la tenéis enseñando su tatoo. Como el padre.

Naturaleza pura


Buenas noches.
Lo primero pedir disculpas a todo el que esté al otro lado y estuvo pendiente del devenir de los hechos, pero esta noche por fin acabaremos con el relato del alumbramieto.
Pongámonos en situación.
Al llegar al hospital de nuevo, la médico de guardia nos confirmó que estábamos de parto.
Se nos condujo a una habitación con una cama donde estábamos solos los dos. En ese momento apareció la reencarnación de la madre tierra ante nosotros, un matrono, con voz dulce y gesto sereno. Nos preguntó si queríamos dar a luz allí mismo y en ese momento, Esther y yo nos miramos a los ojos y le contestámos que sí. Estábamos los tres solos, los tres luchando por el mismo fin, los tres sufriendo calor, los tres sufriendo dolor, los tres solos.
Tras un tiempo de agonía y viendo que no se conseguía nuestro objetivo, el matrono siempre con su arrebatadora tranquilidad nos volvió a preguntar si queríamos intentarlo de otra forma y de nuevo nos abandonamos a su sabiduría. Puso a Esther boca abajo y apollada sobre sus extremidades la incitó a seguir esforzándose para que pudiera sair nuestra pequeña. Naturaleza pura.
Yo, ensimismado por tal evento intentaba ayudarla con mi propio cuerpo y con gestos y palabras de lucha y de cariño. Naturaleza pura.
Pero no pudo ser, ese no era nuestro momento. El matrono nos mandó llevar al paritorio para que allí con menos calor y más ayuda pudieramos poner fin a tal sufrimiento (les recuerdo que la madre no tenía puesta la epidural).
Entonces la condujeron a la sala mientras a mí me hicieron esperar fuera, que sabio quien afirmó que la ignorancia es el peor de los males.
Cuando todo estuvo preparado volvieron a permitirme la entrada en la sala y pude asistir de nuevo al final del alumbramiento. Esther seguía sudando, esforzándose con toda su alma mientras se mantenía tan preciosa...
Al esta tremedamente fatigada, en este caso el médico al frente de la situación volvió a sacarme de la sala puesto que tendrían que ayudar a la madre y a la niña mediante una ventosa (instrumento normal en el parto).
Ya sólo pude entrar cuando todo pasó, pero eso si, justo cuando Alejandra vio su nuevo mundo yo ya estaba aferrado a la mano de su madre. Me la trajeron y me la dieron para que la abrazara. En ese momento mi estómago dió un vuelco.
Este ha sido el gran cambio en mi vida. Ahora lo único que nos queda es luchar para que la nueva familia siga adelante enfrentándose a cualquier adversidad.
De nuevo Naturaleza Pura.

Foto de la peque después del arrugamiento del padre



Miren como se quedo la muchacha, como si no hubiera pasado nada.
Yo aún no ando como debería.

No quiero, no quiero, no quiero

Hola a todos de nuevo.
Se que esperábais que continuásemos con el aconteciemiento del alumbramiento, pero no puedo dejar pasar por alto el como yo lo llamo y perdonénme la expresión "arrugamiento de huevos".
El día de ayer fue perfecto, como todos los anteriores. La pulguita cumple con sus derechos y obligaciones que son dormir y comer. Nos acostamos y en el primer sueño, sería sobre las 00:30 horas, se despertó llorando y gritando como nunca antes. Le dimos el pecho creyendo que era hambre lo que nos solicitaba, pero no se calmaba, sin lugar a dudas era otra cosa. El sufrimiento duró una hora aproximadamente y ese es el momento en el que cada llanto o grito de la pequeña hacía que cada vez más se "me arrugaran los huevos" (vuelvo a pedir perdón por la expresión, pero les puedo asegurar que es la que refleja con más exactitud lo que uno sintió). A la hora y ya desesperados decidimos ir en ayuda de la abuela que vive a 5 minutos de casa, nos montamos en el coche y voilá, se acabaron los dolores, los llantos y se quedó dormida como un angelito.
Hasta ahora todo sigue bien, igual que siempre, perfecto.
Pero os puedo decir que no quiero, no quiero, no quiero que le vuelva a pasar.

P.D.: Prometemos más fotos pero en el departamento de comunicaciones exiten algunos problemas de infraestructura. Esperamos dejarlos resuelto lo antes posible.
Disculpen las molestias.

El principio de los principios


Estimada familia y amigos.
Debido a la incesante demanda de cotilleo sobre el nacimieto de Alejandra, me veo en el placer de invitaros a este blog, donde intentaremos plasmar el acontecimiento que ha cambiado la vida no sólo de sus padres, sino que afectará el devenir del universo en un breve espacio de tiempo.
En efecto. Tenéis todos un coeficiente intelectual bastante avanzado. Esta pre
ciosidad es Alejandra (no Alejandrita, ni Alita, ni nada por el estilo, aunque a mi
me gusta Ale).
La niña nació el 28 de Febrero de 2008 a las 02:25 horas de la madrugada. Durante la tarde del 27 estuvimos en el Hospital Maternal Virgen del Rocío, porque Esther tenía la tripa dura y manchó un poco.
En el Hospital, tras 5 horas de espera nos comentaron que aún no teníamos contracciones de parto y que podíamos irnos a casa tranquilamente.
Así pues en esas circunstancias y sabiendo ya todos que a mí no me quita el hambre ni una guerra nuclear, llevé a Esther a casa y mientras ella se duchaba para relajarse un poco yo me acerqué a un restaurante chino a comprar unas ricas viandas con las que apaciguar a mi estomaguito (error que ya comentaré más tarde).
La cena en sí fue un desastre, mientras opaito ingería copiosamente rollitos de primavera y arroz tres delicias, omaita intentaba acostada en la cama calmar los incesantes dolores que le entraron desde que salimos del Hospital.
Cuando fui a la misma para acostarnos definitivamente, Esther se levantó puesto que no soportaba estar tumbada y comenzó a dar paseos por el pasillo de casa controlando las contracciones que cada vez se sucedían más rápidamente. Fue en esos momentos en los que aquí el menda demostró estar a la altura de las circunstancias y me quedé dormido.
A las 24:20 de la noche aprox. Esther me despierta y me dice que nos vamos al Hospital, palabras textuales: "gordi, vámonos porque si esto no son dolores de parto yo me quiero morir".
Nos vestimos en 0,2 segundos, recogimos a la suegri en Mairena del Aljarafe (porque aquí no se paría sin la máma) y nos presentamos en el Hospital en 20 minutillos.
Al entrar en la sala de la médico, que era la que nos dijo que no estábamos de parto y vió la cara de Esther, le comentó que ahora sí, la exploró y entonces saltaron las alarmas. Aquí la omaita, había aguantado en casa hasta dilatar 8 centímetros, por lo que estaba a punto de explotar, ni siquiera daba tiempo a poner la epidural, no tendría efecto. Nos metieron directamente en una sala a la espera de un matrono ( que es el masculino de matrona) pero Esther necesitaba imperiosamente empujar, ya fuera para dar a luz como para miccionar. Se metió con ella una enfermera en el servicio por si en el apretón salía la niña.
Entonces fue cuando comenzó para mi punto de vista el momento más duro pero mágico de toda la noche.